Dicen que después de la tempestad siempre llega la calma, pero qué queréis que os diga, yo durante el partido estuve cabreado, desilusionado, resignado... pero desde luego calmado no, por mucha preseason que sea. La "Snoopy Bowl" entre Giants y Jets se hizo esperar un par de días a causa del Huracán Irene que azotó la costa este de los Estados Unidos durante el pasado fin de semana y, visto lo visto, algunos jugadores parece que no se enteraron del cambio de fecha, porque aunque estuvieran físicamente en el MetLife, sus mentes parecían estar en otra parte.
La mejoría que se había visto en el partido anterior contra los Chicago Bears fue borrada de un plumazo por la apatía y las malas sensaciones que dio el equipo sobre el campo. Los equipos especiales se llevan ya la palma, los peores de toda la NFL y de largo. El jugador más señalado de la noche fue el rookie Jerrel Jernigan, que tuvo un partido para olvidar en los retornos de punt con tres drops y un fumble, casi nada. En la única ocasión en la que consiguió atrapar el football de forma limpia, Jernigan hizo un retorno de 22 yardas que podría haber sido mucho más grande de haber leído mejor los bloqueos. En total, 30 yardas en cinco retornos, unos números lamentables que no son dignos de NFL. Y me sabe mal tener que ser tan duro con un chaval que justo empieza y que todavía no tiene confianza, especialmente porque es un jugador con talento y que me gusta, como ya dije en los análisis del draft, pero tiene que ponerse las pilas. Por el momento, no se merecería jugar el primer partido de la temporada ante los Redskins. No todas las hostias van a ser para el rookie, ya que Devin Thomas no estuvo mucho mejor en los retornos de kickoff, con un total de 30 yardas en tres recepciones, una de ellas de 23. Fue especialmente sangrante y ridículo un retorno en el que hizo un drop al borde de la end zone, junto a la banda, y el balón se marchó del campo en la yarda cinco. Las coberturas en los kickoffs fueron lamentables, y lo peor de todo es que es algo que no viene de ahora, ya que la temporada pasada los fans nos tirábamos de los pelos por la desesperación que nos producía esa faceta del juego. Antonio Cromartie consiguió un retorno de 68 yardas en una imagen patética compuesta por jugadores vestidos de azul rodando por el suelo e incapaces de sacarse sus bloqueos de encima. Menos mal que apareció Rhys Lloyd, ¡¡¡el kicker!!!, para empujar a Cromartie fuera del campo siendo el último hombre de los G-Men cuando éste ya se relamía los labios. Y es que Lloyd fue el único que se salvó, ya que a parte de ese placaje tan importante, mandó un kickoff más allá de la end zone y consiguió un field goal de 34 yardas. Cierto es que falló otro de 42, pero él no tuvo la culpa, ya que por segunda vez en tres partidos sus compañeros fueron incapaces de proteger al kicker y permitieron el bloqueo de la patada. Cuando iniciaba esta entrada y hablaba de cabreos, me refería principalmente a cosas como esta. Los punters estuvieron a un nivel correcto, sin más. Weatherford consiguió mandar un balón dentro de la red zone rival y Matt Dodge parece cada día mejor, nunca imaginé que llegaría a decir eso.
Pasamos al ataque, donde la situación no es tan mala porque estar peor que los special teams es materialmente imposible, pero sí que arroja algunas dudas. Para empezar, han vuelto los turnovers de la mano de Eli Manning en su reencuentro con las intercepciones, en concreto dos. Le hemos oído decir que estaba mejorando en su toma de decisiones y bla bla bla, pero a la hora de la verdad esto es la misma
Y acabamos con la defensa, sin duda el núcleo duro, la que mantiene al equipo en los partidos, aunque estadísticamente veamos que contra los Jets no se consiguió ningún sack ni ninguna intercepción. El front seven está funcionando especialmente bien, aunque esté faltando algo de pass rush, pero no me preocupa, los jugadores con la capacidad de presionar al quarterback rival los tenemos. En la defensa contra el pase sí que sufrimos más, pero contra la carrera estamos rayando a un gran nivel, cuando los titulares están sobre el campo a penas se han concedido big plays terrestres a lo largo de esta pretemporada. Justin Tuck es el líder de esta defensa y el que encarna esa disparidad entre rendimiento, trabajo sucio que pasa desapercibido y números estadísticos. Tener a un jugador que siempre está encima de la jugada, que a pesar de jugar en los lados de la línea no descuida su compromiso de parar la carrera, eso no está pagado. Fe ciega en él y en su liderazgo, además, los sacks acabarán llegando seguro. Michael Boley también está jugando muy bien en el lado débil, acabó el partido con seis placajes y se mostró muy agresivo en la línea de scrimmage. En el lado contrario, Mathias Kiwanuka estaba completando un buen partido hasta que tuvo que dejar el campo por una pequeña lesión sin importancia en la ingle. Su sustituto, Clint Sintim, también se mostró muy productivo con seis placajes y un fumble recuperado después de una pérdida absurda de Mark Sanchez. En la secundaria, hay que celebrar el buen nivel que está ofreciendo Aaron Ross, que secó a Plaxico Burress cubriéndole perfectamente en varias ocasiones. Le necesitaremos, y habrá que esperar a que el físico le aguante. Antrel Rolle también cuajó un buen encuentro en la cobertura en slot impidiendo completar pases en su zona y haciendo un gran trabajo, es otro de los pilares de la defensa. El rookie Tyler Sash destacó, siendo el máximo placador del equipo con seis tackles, y el jugador que está por delante de él en el deph chart, Kenny Phillips, también estuvo muy activo con cuatro placajes y estando siempre cerca de la jugada. Debutaron los últimos fichajes, el defensive tackle Jimmy Kennedy y el cornerback que viene a "ocupar" el hueco dejado por Terrell Thomas, Brian Williams, con algún placaje pero sin demasiada influencia.El próximo partido será contra New England Patriots en la madrugada de hoy, jueves, al viernes, y pondrá punto y final a esta pretemporada. Después, el sábado, será día de cortes y los jugadores descartados abandonarán el equipo hasta conformar el roster de 53 hombres. ya tenemos ganas de que llegue la hora de la verdad.
Un saludo.
Tienes más razón que un santo con lo de Manning, los Giants no puedes correr ese riesgo cada vez que lanza un pase... incluso Sanchez aparante más tranquilidad y profesionalidad que Eli y es un QB de 3° anio... lamentable.
ResponderEliminarEs que el año pasado acabó con 25 intercepciones, una auténtica burrada, y este año no pinta mucho mejor por lo que se le ha visto hasta ahora...
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